¿Quién es esa persona que está delante del espejo?

Nadie como uno mismo es capaz de conocerse mejor, pero aún así, ni si quiera nosotros mismos llegamos a conocernos del todo. A veces creemos algo sobre nosotros que en realidad no es cierto, o que nuestra mente lo ha modificado a nuestro gusto alejándolo de la realidad. Incluso, muchas veces son las personas de nuestro entorno las que ven más realidad en nosotros que nosotros mismos, porque nos empeñamos en creer algo que no es, debido a mil y un motivos.

Muchas veces llegamos a darnos cuenta de que nuestra teoría no era la verdadera, que vivíamos en un mundo creado por nosotros, amoldado a nuestro gusto y nuestras necesidades, a veces por no enfrentarse al mundo exterior, por miedo. Ahí es cuando chocamos con la realidad y nos damos de morros. Esto a veces puede doler, puede hacer que nos decepcionemos a nosotros mismos por haber creído ser algo que no eramos. Dependiendo de la situación nos dolerá, o por lo contrario nos aliviará. Saldremos de ese estado al que estabamos aferrados y que no nos hacía ver las cosas con claridad. Será una liberación de nuestra propia mentira.