Buenos días, cariño

La esperanza es lo último que se pierde. Sí. Porque si no hay esperanza no queda nada, no queda el más mínimo sentido en tu vida. La esperanza es lo que te hará ir detrás de tus sueños hasta hacerlos realidad. Y si dejas que querer perseguir tus sueños, ¿qué te queda? Nada, la vida esta hecha de sueños, por eso no podemos perder la esperanza.

¿Te imaginas la vida sin propósitos? Yo no. Es como imaginarse el universo sin vida humana. ¿Qué hay? Nada. El tiempo pasa y no llegamos a ningún lado. Pero eso no pasa gracias a que tenemos metas que cumplir en nuestras vidas.

Desde bien pequeños empezamos a construir nuestras metas. Soñamos con ser veterinarios, astronautas, enfermeros, etc. Puede que esas metas se queden solo en eso, en metas a las que nunca llegaremos, porque con el paso del tiempo nuestros sueños van cambiando. Pero siempre nos mantendremos vivos con nuevos propósitos.

Todo lo hacemos por un motivo. ¿Por qué estudiamos? Porque algún día queremos llegar a ser el mejor de los profesores, el mejor de los escritores, queremos conseguir algo. ¿Por que vamos al gym? Porque queremos estar sanos, queremos ponernos en forma, queremos ponernos buenorros, nos gusta alguien del gym, ... todo vale.

Todo eso son pequeños propósitos que poco a poco vamos consiguiendo. Pero ¿y en el amor?

En el amor se vuelve un poco más complicado. Resulta más fácil tirar la toalla porque nos llevamos más palos. Pero ¿cómo vamos a abandonar el sueño de encontrar a alguien que nos haga feliz, a ese principe azul o a la princesa de nuestros sueños, esa persona que nos despertará en la cama con un "Buenos días, cariño" acariciandonos la cara?

No podemos renunciar al amor. No hay vida si no hay amor. Por supuesto que hay muchas personas que viven solos y son felices, pero no hay mejor sensación que la de tener a alguien que sabes que siempre va a estar ahí, que te va a querer y vas a disfrutar haciéndole feliz y él o ella a ti. Por eso nunca debes tirar la toalla, tarde o temprano llega el amor para volver a hacerte sentir como en una nube.